Lo primero que dijo fue algo así como "Este tipo escribe muy bien pero no tiene nada qué decir". Yo pispié y vi que aún le faltaban algunas páginas para terminar y pensé que en una de esas al final levantaba. Y fue más o menos así, según ella si se unen las primeras veinte páginas con las últimas diez quedaría una genialidad, pero en el medio hay un relleno con chanchaditas supuestamente trasgresoras y/o modernas, llenas de palabras subiditas de tono como por ejemplo "vagina". En esto se mezcla algunos toques autobiográficos modificados. Su conclusión es que el famoso Auster es un gran escritor, pero es más grande cediendo a los pedidos del comercio editorial.
Y bueno quién lo puede culpar a Pablito Austero, después de todo vivir en New York debe ser carito.